Fabricamos nuestras pastillas S50 con un compuesto orgánico de fricción, optimizado para ofrecer una respuesta estable desde temperatura ambiente hasta los 550 °C. A diferencia de otros compuestos más agresivos (como los sinterizados o metálicos), el S50 ofrece un equilibrio ideal: no es abrasivo con el disco, pero mantiene una fricción constante y predecible.
El valor de coeficiente de fricción medio (μ) se sitúa en 0,44, lo que permite una excelente capacidad de frenado sin necesidad de calentar. Además, su fórmula mejora la mordida inicial (bite), algo crucial en conducción urbana o ante imprevistos. El 90% de las referencias de la gama S50 cumplen con el coeficiente de fricción GG para un frenado más potente tanto en frio como en caliente.